Algunas mujeres famosas
Se me ocurrió, a modo de homenaje a las mujeres, mostrar a un par de mujeres famosas:
Que tal? la original y el dibujo
Las camionetas Chevrolet
Hay seres que son más estructurados que otros, creo que soy uno de ellos. Cuando tenía 6 años aprendi, casi con desesperación, a leer. Me desesperaba saber que decía el diario, me desesperaba poder leer los globitos de las historietas, tenía una curiosidad que no solo no cayó con los años sino que aumentó y se magnificó.
Al principio me vastaba con saber pronunciar lo que leía pero luego necesité comprender a fondo el significado de eso que estaba escrito.
En ese afán de comprender lo que leía, una vez leo, detrás de una camioneta, el cartel: «C H E V R O L E T«. Como podrán imaginarse, al ser yo una persona con tendencia a estructurar y estandarizar, lo primero que fui aprendiendo fueron las reglas ortográficas y, lo primero que noté en ese cartel fue la «V» corta seguida de la «R«; por supuesto, mi primera reacción fue creer que se trataba de un error y, hasta creo que lo comenté a mi madre en ese sentido: mirá que mal que escribieron. Ella, muy pacientemente, me explicó que, tratándose de nombres propios, no se aplicaban las reglas ortográficas (Con el tiempo comprendí que solo algunas veces no se aplican y que, en este caso, aparte de ser un nombre propio, se trataba de una palabra con origen en otro idioma distinto del castellano).
A que viene todo esto? a que fue la primera vez que me topé con una regla que me acababan de enseñar y que era violada sin ningún reparo en la vía pública, a partir de allí comencé a aprender reglas y a notar que, en algunos casos, la excepción era la regla y la regla la excepción.
Para una persona tan estructurada como yo, significó un golpe y una desilusión, nunca voy a olvidar a las camionetas Chevrolet y a ese «error» ortográfico.
Einstein tenía razón
Porque algunas horas son mas largas que otras?, algunos días, semanas, meses, parecen no terminar nunca y otros se van, simplemente se van sin que nos demos cuenta.
Definitivamente el maestro Einstein tenía razón cuando sostuvo que el tiempo era una dimensión relativa pero, a diferencia de él, no tengo la menor idea de que depende eso, a veces por buenos, y a veces por malos pero los tiempos son distintos siempre.
Esta imagen solo refleja un sentimiento que aflora de vez en cuando.
La impunidad de Homero
Creo que parte del éxito de este personaje se debe a su impunidad, se comporta como un chico sin medir las consecuencias de sus actos y siempre, invariablemente, le salen las cosas bién.
Sus autores lograron combinar la fantasía con la realidad de una manera excelente; tiene la suficiente dosis de realidad para que todos veamos situaciones cotidianas similares a las nuestras y nos identifiquemos con alguno de los personajes aunque sea parcialmente pero, la dosis de fantasía la pone el hecho de que, invariablemente, todo lo que se haga o se diga no tiene ninguna consecuencia mala para sus protagonistas,(sobre todo para Homero).
Este personaje gordo, maleducado, desagradable, siempre se las ingenia para criar a sus hijos, para ser amado por su esposa y para hacer, en definitiva, lo que quiere.
Elmer y el conejo
¿Quien no vio alguna vez al pobre Elmer tratando de atrapar al conejo?
Todos queríamos ser como el conejo, despreocupado, seguro de si mismo, ganador. Un tipo que se reía de los problemas y se divertía gastándole bromas a quienes querían hacerle daño. Incapaz de odiar pero absolutamente impiadoso y desconsiderado.
El problema es que en la vida no pueden ser todos orejudos y comer zanahorias, es más, la mayoría es peladito y con gorra y cambia las «R» por «W». En síntesis: somos los giles de la historia.
INCOHERENCIAS 